BIOGEOGRAFÍA DE ESPAÑA

jueves, 8 de diciembre de 2011

EMA 5.- BIOGEOGRAFÍA

1.-Regiones y provincias biogeográficas:

En la división biogeográfica del mundo, España pertenece al Reino Holoártico Boreal que se extiende por los continentes al norte del trópico de Cáncer. Este reino comprende 11 regiones de las cuales, tres están presentes en España: la Región Eurosiberiana, la Región Mediterránea y la Región Macaronésica.
a) La Región Eurosiberiana la dividimos en dos provincias llamadas provincia atlántica que ocupa la fachada atlántica el norte y noroeste peninsular y la provincia submediterránea que comprende la zona este hacia los Pirineos.
b) la Región Mediterránea: ocupa el resto de la península y las Baleares. El principal rasgo de su vegetación es el carácter perennifolio debido a las exigencias de adaptación al medio que impone el clima, que es más seco que en la España Eurosiberiana. La sequía estival obliga a las plantas a reducir la evapo-transpiración, por eso sus hojas son pequeñas con raíces extensas y profundas. La vegetación mediterránea tiene un crecimiento lento debido a las condiciones medio ambientales.
La planta más representativa del bosque mediterráneo en su estado original es la encina, llamada quercus ilex, es un árbol que se adapta muy bien a suelos y climas diversos, puede vivir hasta en alturas de 1000 metros en las mesetas y hasta los 2000 en Sierra Nevada pues se adapta muy bien al frío. Al abrigo de la encina crecen muchos arbustos: el madroño, el lentisco, la jara, y plantas aromáticas y medicinales que forman el matorral mediterráneo
En los suelos silícios y en zonas de temperaturas suaves y con mayor cantidad de lluvia, aparece el alcornoque, quercus suber, cuya corteza, el corcho, es producto de una explotación característica de Andalucía y base de una industria importante.
c) La Región Macaronésica: a ella pertenece el archipiélago Canario. Sus rasgos principales son la variedad florística y la cantidad de especies endémicas que en ella existen. La diversidad es producto de las influencias del mundo atlántico, mediterráneo y africano y el endemismo es debido a su insularidad, que fortalece la vegetación autóctona.
Teniendo en cuenta la constitución volcánica de la isla y su clima subtropical, encontramos que en las zonas más bajas existe una vegetación de matorral, cuyas especies principales son el cardón y la taiba; algo más elevado se encuentra el bosque de laurisilvas
(laurel) pues la temperatura es más fresca ( altura de 500 metros) Por encima de este bosque aparece el bosque de coníferas formado por pino canario y algunos cedros.

2.-LOS BOSQUES DE LA PENÍNSULA IBÉRICA.

Los bosques son formaciones naturales de árboles en cuyo interior se crea un microclima especial gracias al efecto protector de sus copas. Dentro del bosque, el ambiente es más sombrío y húmedo que en el exterior, además en el suelo se acumulan restos vegetales que aseguran un aporte continuo de materia orgánica. La península ibérica comprenden un territorio eminentemente forestal, extensas zonas hoy deforestadas lo están por la acción humana, pues el territorio es muy apto para la vegetación.

TIPOS DE BOSQUES IBÉRICOS

BOSQUES DE ALTA MONTAÑA
(Hay que tener en cuenta que en la alta montaña del Pirineo, de los Montes Cantábricos y Sierras Ibéricas a partir de una determinada altura ya no es posible la existencia de bosque y aparece el matorral).
-El bosque característico de la alta montaña es el bosque de pino negro y abetales ( abetos), ambos son bosques de coníferas. Los pinares de pino negro forman el bosque que vive a mayor altitud en la península y en condiciones muy difíciles, pues forma bosques allí donde ningún otro árbol puede prosperar. Se encuentran en ambientes con inviernos largos y fríos y veranos cortos y frescos. Los pinares forman masas densas que se localizan entre 1700 y 2000 m de altura, pero hasta los 2300 mt. se pueden encontrar pinos aislados. Crece por lo general con un sotobosque de arbustos de hoja perenne, destacando el rododendro y el enebro rastrero.
-Los abetales se encuentran en ambientes menos difíciles que el pino negro. Son propios del Pirineo y se desarrollan entre los 1000 y 1800 mt. Forman un tipo de bosque sombrío y denso poco favorable para el desarrollo de arbustos, el sotobosque es ocupado por plantas herbáceas y musgo.


BOSQUES DE MONTAÑA MEDIA HÚMEDA.
En las zonas de clima oceánico, lluvioso y fresco sin un periodo de sequía estival, se desarrollan los bosques de hoja caduca, aunque en algunas zonas encontramos también pinares del tipo albar y negral.
-En el Pirineo occidental y en las montañas del sistema Cantábrico y Macizos Galaicos más elevados, se desarrollan los bosquecillos de abedules, que soportan muy bien la humedad y el frío.
-Los hayedos son bosques que se encuentran en zonas de elevada humedad y sobre suelos bien drenados. Son bosques densos y se dan en el eje Pirineo- Cantábrico y también en el Sistema Ibérico aunque más aislados. Son importantes en la sierra del Moncayo, donde forma bosque hacia los 1300 mt. También aparecen en el Macizo Central. El haya crece en ambientes donde no hay limitaciones de agua. Tiene mucha importancia en el paisaje asturiano, cantábrico y vasco. Cuando el clima es favorable, pueden crecer las hayas a niveles inferiores siempre que haya suficiente precipitación y humedad. En las zonas mas bajas prospera mejor el llamado carvallo que se encuentra entre los 400 y 600 mt. El hayedo forma grandes bosques en Asturias pero disminuye hacia Galicia, donde se encuentran pocos, casi en estado de reliquia.
-Pinares de pino albar: estos bosques son frecuentes en el Pirineo, Sistema Ibérico. Sistema Central y Serranías Béticas. Es el bosque típico de los ambientes muy fríos de la montaña media continental cuyo clima es frío con veranos cortos y secos.
-Los pinares de tipo negral son propios de zonas de transición, ocupan zonas más bajas que los pinos albar y se encuentran en zonas algo más cálidas, pero suficientemente frías todavía para impedir que aparezcan ya los robles.
-Los robledales (Quercus pubescens) se mezclan con el hayedo en muchos lugares. El roble es un árbol de clima oceánico que crece entre los 700 y 800 mt. En el Pirineo llega desde los 500 a los 1000 m.Las zonas más frescas y húmedas del norte cuentan con robledales del tipo carvalledo ( Quercus robur). Forma un bosque denso, pero no tanto como el hayedo. El carvallo ha sido muy destruido en la zona norte de Portugal pues dan una excelente tierra de cultivo y los seres humanos los han convertido en prados artificiales. Si el bosque de carvallos desaparece, su espacio es colonizado por los brezos y tojos, también por abedules. Los carvallos cubren grandes extensiones en el País Vasco y en el Pirineo, por ejemplo en el Valle de Arán. En la zona cántabra, las principales plantaciones de carvallo han sido sustituidas por castañares y pinos rodeno o pinastro.
Tanto los hayedos como los robles producen gran cantidad de fruto.
-El melojar es el robledal ibérico por excelencia. Se encuentra desde el Pirineo occidental a Galicia, en las montañas del Ssitema Central y hasta en Sierra Nevada. En las cercanías del Mediterráneo aparece en algunas montañas. Es un árbol que crece entre los 800 y 1500mt. sobre suelos de tipo ácido, con menor influencia marítima que los anteriores, puede tolerar períodos de sequía y pérdidas de agua. Forma bosques no muy densos y ha estado sometido a enorme explotación humana. El melojar se encuentra también en Cataluña, pero difieren de los melojares de la costa Atlántica.
-El quejigal (quercus faginea) es un robledal de clima seco, propio de las montañas prepirenaicas, de las montañas que bordean la meseta, de las sierras costeras catalanas y levantinas y también de las serranías Béticas. Se desarrolla en zonas apartadas de la influencia marítima, con lluvias escasas y fuerte insolación. El tamaño pequeño de las hojas nos indica que es un árbol que se desenvuelve bien si falta el agua. El quejigo es un árbol que recuerda a la encina, pero tiene también características de los robles, es más resistente que la encina.
-El robledal de roble peludo se encuentra en montañas de tipo medio en el noreste peninsular y no tolera un clima excesivamente frío.

BOSQUES DE TIERRA BAJA MEDITERRÁNEA
En la penísula se encuentra la mayor extensión de bosques mediterráneos de toda la cuenca que baña este mar. Sus bosques son de hojas perennes, duras y rígidas para resistir la sequía.
-Los carrascales ( encina carrasca o quercus rotundifolia) es el bosque más extenso y frecuente de la península. Vive en todas las tierras del interior, desde Galicia a Cataluña, Castilla y Andalucía. Habita entre los 300 y 1000 mt. Tolera bien la poca lluvia, resiste inviernos crudos y veranos largos y calurosos. La carrasca es capaz de tolerar los más duros climas peninsulares, pero la destrucción del hombre ha sido muy profunda y tan completa que el arbolado casi ha desaparecido en amplios territorios. Las llanuras, antes pobladas por carrasca, hoy son zonas de cultivo. Los tomillares, aliagares y los espartales, constituyen la etapa final del largo proceso de deforestación sufrido por la carrasca, cuya rehabilitación y restablecimiento del monte primitivo es hoy casi imposible.
-Los encinares (quercus ilex). Las encinas son árboles de hojas duras y es la especie más representativa del paisaje mediterráneo. Son árboles verdes todo el año, adaptados al clima templado, de veranos secos y períodos de sequía. Es un árbol de producción masiva de fruto en gran parte del año.
-Los alcornocales( quercus suber) : es el bosque que en Andalucía, Extremadura, Cataluña y centro de España, ocupa las zonas de más lluvia que las encinas. Es un bosque claro que coloniza zonas de suelos arenosos. Es un árbol que tolera fuerte insolación. El alcornoque tiene el cuerpo cubierto de una capa de corcho, material aislante de primer orden. Estos bosques se ven frecuentemente sometidos a incendios, aunque el alcornoque rebrota tras los incendios. El alcornoque se desarrolla en suelos silíceos, en el extremo sur de la costa malagueña y gaditana y llega hasta la cuenca del Tajo. Soporta bien el clima templado y no muy seco.
-Pinares de pino carrasco: estos bosques son frecuentes en toda la zona próxima al litoral mediterráneo, desde Cataluña a Andalucía y Baleares. Es un bosque poco denso. Este pino es una planta sufrida que retiene poca agua.
-El palmito: es el único representante europeo continental de la familia de las palmiáceas. Se da en el litoral mediterráneo, desde Gibraltar hasta Cataluña. Es una planta de clima templado y de lluvias escasa. Es la única palmera autóctona de la Europa continental.
-El sabinar albar: donde el clima es muy frío y no prospera la carrasca, se encuentran las encinas tipo sabina albar. Forman bosques mixtos en el sistema Ibérico, Montes Cantábricos. Es un bosque muy poco denso. Las nebredas son formaciones de sabina albar pero más resistentes al frío y la sequedad.
-Los Pinsapares: son bosques propios de la montaña mediterránea, con mucha pluviosidad. Estas condiciones se dan en la Serrania de Cádiz en Grazalema, cerca del mar. Es un bosque de coníferas con formaciones muy densas, toleran bien la sequía estival.

VOCABULARIO DEL TEMA

ECOSISTEMA
BIOTOPO
HÁBITAT
BIODIVERSIDAD
ENDEMISMO

3.-DETERIORO Y DEGRADACIÓN AMBIENTAL.
LOS ESPACIOS PROTEGIDOS

En España, al igual que en el resto del mundo desarrollado la actuación humana tiene una enorme incidencia sobre la biodiversidad. Esto es consecuencia del mito del progreso indefinido, que se basó en el consumo indiscriminado de recursos naturales sin control. Esta actitud hoy día, gracias a la conciencia ecologista que se está desarrollando en todo el mundo, ha sido sustituida por lo que se conoce como desarrollo sostenible, es decir, usar los bienes que la naturaleza ofrece pero asegurando su renovabilidad en beneficio de las futuras generaciones.
Entre los principales impactos ambientales destacamos las actividades extractivas, la agricultura que utiliza fertilizantes y abonos contaminantes, la deforestación, la sobreexplotación de los acuíferos, los incendios forestales y el deterioro de las costas por la construcción especulativa.
Todos estos problemas que se dan en todo el mundo no sólo en España, han llevado a la comunidad internacional a preocuparse por el medio ambiente para proteger la biodiversidad del planeta. En España existen 257 especies animales y vegetales en peligro de extinción y 12.500 especies amenazadas.
El convenio de Ramsar en 1971, fue un primer contacto con la realidad. Por este convenio los países participantes se comprometieron a preservar las zonas húmedas de sus territorios. La Cumbre de Río es una de las más recientes conferencias sobre protección de la biodiversidad, también lo es el protocolo de Kioto, importante para controlar las emisiones de CO2 y evitar en lo posible el cambio climático.

Los espacios protegidos.

La protección de la naturaleza en España se remonta a 1916 cuando una Ley de Parques Nacionales estableció los dos primeros Parques Nacionales de España: Ordesa y Covadonga.
Pero las preocupaciones ecológicas pasaron a segundo término hasta la llegada de la Democracia, cuando por fin en España se pudo tomar conciencia de la importancia de la protección de la naturaleza. En 1975 se promulgó la Ley de Espacios Naturales Protegidos, para actuar de alguna manera contra los impactos ambientales. La Ley más importante es la Ley de Conservación de los Espacios Naturales y la flora y fauna silvestre de 1989, desde la aplicación de esta ley las comunidades autónomas han declarado espacios protegidos a 524 lugares de la península, que pretenden ser una muestra representativa de nuestra biodiversidad y de los principales ecosistemas españoles. En superficie, está protegido el 6% del territorio nacional.
Podemos distinguir entre dos tipos de Protección:
Parques Nacionales que ocupan la mayor extensión, son zonas de montaña escasamente pobladas de interés ecológico porque en ellos se intentan preservar los ecosistemas originarios de la península. Son Parques Nacionales el de Doñana, el de Ordesa, el de Garajonay en la Gomera y el de Sierra Nevada.
Parques naturales son lugares que ya han sido transformados por el ser humano pero que se intenta que no se deterioren más y se mantengan con sus valores ambientales. Andalucía concentra la mayor cantidad de Espacios Naturales Protegidos debido a la variedad de los ecosistemas que en ella existen.
Hay una gran variedad de tipos de espacios protegidos: pueden ser reservas naturales, zona de especial protección de aves, reserva de la biosfera, parques periurbanos, reserva natural. En Andalucía son 1.590.000 hectáreas las que están protegidas, o sea el 18% de su territorio. Se procura que la preservación de los espacios naturales vaya acompañada de fomentar el aprovechamiento ordenado y sostenible de la zona, para que los recursos redunden en beneficio de los municipios que tienen lugares de protección.

Read more...

About This Blog

Lorem Ipsum

  © Blogger templates Newspaper by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP